La problemática de los clubes y principalmente los denominados "de barrios" es cada vez más delicada.

A la cruda realidad económica que afrontan a diario se les suma la inseguridad que reina desde hace años pero que en tiempos como estos se acentúa aún más.

En las últimos días varias instituciones fueron víctimas de diversos hechos delictivos.

El club La Esperanza es quien hace pocas horas sufrió el robo del tendido eléctrico de la cancha de fútbol auxiliar, la misma situación que le tocó atravesar a Defensores Unidos la semana pasada.

A esto hay que sumarle los hechos ya conocidos que se produjeron en el club El Tanque, Independencia Fútbol Club, El Porvenir, San Roque, Villa Igoillo y Banfield, entre otros, o hasta el mismísimo Estadio Municipal donde en las últimas semanas hubo varias sustracciones de bicicletas.

Y como si algo faltara, por estos días aparecieron algunas personas preocupadas por las obras que se están realizando en el club El Tanque o el faltante de una planta, pero nadie preguntó ni se interesó por los robos sufridos allí, pero es la misma zona donde se han realizado construcciones imponentes de todo tipo pero ante eso nadie dijo nada. La entidad decidió realizar el cerramiento perimetral de la cancha ya hartos de los robos.

La problemática es interminable y no hay demasiadas herramientas si no es con la colaboración de todos. Pero lo más grave y doloroso es que para que a los delincuentes les rinda hay gente del otro lado que compra y se interesa, es más, han habido casos en el que las personas que lo hacen están o estuvieron participando en esas mismas instituciones.